podría empezar así como un comic de nuestra infancia... pero, la diferencia es que no hay ni posión mágica, ni druida, ni nada para nuestros héroes.
es más, nuestros héroes simplemente son víctimas a los cuales la avaricia general que tomó a los otrora dignos castellanos los convierte casi en mártires de un sistema de corrupción que, sea quien sea el partido en el gobierno, azota a la nación española toda.
se trata simplemente del entramado de miseria y corrupción que se encuentra tras las facultades de los alcaldes, sus cada vez más manejables ayuntamientos, y, la sempiterna figura de la "mafia" de la construcción.
en el medio de una "eterna crisis" de la vivienda en la peninsula, se ha desarrollado un exclusivo negocio en el cual, ciertos capitales, tras una noche de copas, damas de alterne, y un sobre logran convencer a un alcalde de que obligue a malvender fundos rústicos a quienes lo han poseído desde siempre... malvender, cuando hay suerte, si no a confiscar violando las mínimas garantías de la constitución de la España moderna.
obviamente, como en todo país donde las crisis son recurrentes es innegable que éstas no son tales sino, el fruto de la decadencia general de los poderes públicos.
no hay alcalde corrupto si hay partido y autoridades partidarias que lo limiten o lo sancionen como un apestado que pudrirá el espíritu del cuerpo, no hay empresas corruptas si la justicia funciona con jueces probos, no hay gobiernos corruptos si la corrupción no es compartida con la oposición.
en fin, la pobre España que hoy nos toca vivir, donde los derechos son un recuerdo o parte de la industria educativa... pero igual, ¡yo tengo esperanza! al menos, algunos leerán y sabrán lo que ocurre.
es más, nuestros héroes simplemente son víctimas a los cuales la avaricia general que tomó a los otrora dignos castellanos los convierte casi en mártires de un sistema de corrupción que, sea quien sea el partido en el gobierno, azota a la nación española toda.
se trata simplemente del entramado de miseria y corrupción que se encuentra tras las facultades de los alcaldes, sus cada vez más manejables ayuntamientos, y, la sempiterna figura de la "mafia" de la construcción.
en el medio de una "eterna crisis" de la vivienda en la peninsula, se ha desarrollado un exclusivo negocio en el cual, ciertos capitales, tras una noche de copas, damas de alterne, y un sobre logran convencer a un alcalde de que obligue a malvender fundos rústicos a quienes lo han poseído desde siempre... malvender, cuando hay suerte, si no a confiscar violando las mínimas garantías de la constitución de la España moderna.
obviamente, como en todo país donde las crisis son recurrentes es innegable que éstas no son tales sino, el fruto de la decadencia general de los poderes públicos.
no hay alcalde corrupto si hay partido y autoridades partidarias que lo limiten o lo sancionen como un apestado que pudrirá el espíritu del cuerpo, no hay empresas corruptas si la justicia funciona con jueces probos, no hay gobiernos corruptos si la corrupción no es compartida con la oposición.
en fin, la pobre España que hoy nos toca vivir, donde los derechos son un recuerdo o parte de la industria educativa... pero igual, ¡yo tengo esperanza! al menos, algunos leerán y sabrán lo que ocurre.
No hay comentarios:
Publicar un comentario